¿Cómo podría ser esto una instrucción o un plan para un autogolpe? «Actuó por su propia cuenta». dijo el presidente a la prensa. En su primera aparición pública desde el miércoles por la noche, cuando declaró terminado el intento de golpe, Arce se defendió de las acusaciones del general Juan José Zúñiga, el comandante del ejército destituido.
Según el exjefe militar, Arce le pidió el domingo «que prepare algo para aumentar su popularidad y le dio su acuerdo para “retirar los vehículos blindados”.
“Dice que le habría pedido que ganara un poco de popularidad. Lamentablemente para él, y así ha quedado demostrado, no soy un político que vaya a ganar popularidad gracias a la sangre del pueblo», afirmó el presidente boliviano. Arce agregó que le parece «escandaloso» que Zúñiga quiera «insinuar para justificar sus acciones y quizás sus apetitos personales.
El presidente también detalló paso a paso cómo vivieron él y su gabinete el «intento de golpe de Estado» e informó que la víspera destituyó a Zúñiga de su cargo por «violar la Constitución del Estado» al dar entrevistas no autorizadas donde amenazó con capturar al expresidente boliviano Evo. Morales (2006-2019) si se presentara como candidato a las elecciones de 2025.
El jefe militar destituido comandó el asedio que tropas y tanques mantuvieron durante varias horas contra la sede presidencial. Derribó la puerta de la sede del gobierno de Arce con un vehículo militar blindado, pero tras ser confrontado por el presidente y su gabinete, se retiró. Finalmente las tropas se retiraron y el general fue detenido junto con el comandante de la Armada, Juan Arnez.
Según Arce, 14 personas resultaron heridas por los partidarios de Zúñiga y algunas requirieron cirugía. “Vimos a la gente movilizarse sin armas y les dispararon”, dijo. Además de los altos oficiales, otros 15 militares y civiles en activo y retirados fueron detenidos por su presunta participación en el fallido golpe militar.